En casa somos amantes del pan casero y solemos probar recetas diferentes. Esta nos encanta porque es tan sencilla y además da muy buen resultado incluso si no tienes mucha experiencia haciendo panes :) Conseguirás un pan crujiente por fuera y esponjoso por dentro! 

Los ingredientes:

• 520 gr de agua


• 20 gr de levadura fresca


• 1 cucharadita de miel


• 500g de harina de fuerza


• 500g de harina de trigo 


• 3 cucharaditas de miel


• 3 cucharaditas de sal (a gusto)

Los pasos:

1. Añadimos el agua, la miel y la levadura al vaso, programamos 2 minutos, 37 grados y velocidad 2 para calentar el agua y disolver la levadura.


2. Añadimos el resto de ingredientes, programamos 4 minutos en modo amasar. Consejo: Ayúdate de la espátula durante el amasado porque es una cantidad grande de harina. Introdúcela por el bocal y muévela hasta que veas que los ingredientes vayan formando una masa.


3. Vuelca la masa en una superficie enharinada, forma una bola y deja reposar en un bol tapado con un paño hasta que doble el volumen (aprox. 1 hora)


4. Vuelca la masa sobre superficie enharinada y pliégala varias veces, forma una bola y dale forma de hogaza.


5. Pincela la masa con agua y hazle unos cortes en la superficie con un cuchillo muy afilado, espolvorea con harina o copos de avena.


6. Coloca en la fuente de horno Betty, cierra con la tapa e introdúcela en el horno sin precalentar


7. Hornea el pan a 230 grados durante 55 minutos.


8. Saca el pan de la fuente  inmediatamente y deja que se enfrie sobre una rejilla. 

¡A disfrutar!

Es una maravilla poder hacer sus propios panes, con ingredientes que una misma decide según sus necesidades y gustos! Os invito a ver cómo ha quedado este pan....¡ojalá lo pudierais ver y oler en directo!